Los baños de ultrasonidos son la mejor solución para conseguir una limpieza perfecta sobre materiales de todo tipo. La limpieza por ultrasonidos es el resultado de introducir ondas de ultrasonido en el agua, a través de una serie de transductores. Estas ondas se transmiten por todo el tanque de limpieza, produciendo una serie de implosiones dentro del agua, un fenómeno conocido como cavitación. Estas implosiones son las que hacen que se rompa la estructura molecular en las partículas y se consiga una limpieza uniforme en las piezas, incluso orificios y conductos internos en el contacto con el agua, difíciles de limpiar por métodos tradicionales.
Los baños de ultrasonidos son la mejor solución para conseguir una limpieza perfecta sobre materiales de todo tipo. La limpieza por ultrasonidos es el resultado de introducir ondas de ultrasonido en el agua, a través de una serie de transductores. Estas ondas se transmiten por todo el tanque de limpieza, produciendo una serie de implosiones dentro del agua, un fenómeno conocido como cavitación. Estas implosiones son las que hacen que se rompa la estructura molecular en las partículas y se consiga una limpieza uniforme en las piezas, incluso orificios y conductos internos en el contacto con el agua, difíciles de limpiar por métodos tradicionales.
Los hotplate, o placas calientes, se utilizan con frecuencia en el laboratorio para realizar reacciones químicas, para calentar muestras y para otras muchas actividades. Las placas calientes son muy sencillas de utilizar: una superficie plana con elementos calefactores. No producen llamas abiertas y son muy adecuadas para el uso de baños de aceite o de arena.